miércoles, 24 de octubre de 2012

#NoVoyAP68agar


Porque una autopista totalmente amortizada tiene que ser liberalizada. #NoVoyAP68agar

Porque es una autopista que en 2011 podía estar ya libre de peajes. #NoVoyAP68agar

Porque los ciudadanos estamos hartos de promesas incumplidas. #NoVoyAP68agar

Porque en sus programas electorales, dicen que la autopista va a ser gratuita y siempre incumplen y nos engañan. #NoVoyAP68agar

Porque no puede ser que la Rioja sea una de los territorios del Estado con menos kilómetros de autovía. #NoVoyAP68agar

Porque alegan que una autopista es un gasto improductivo, cuando un peaje es un gasto a descontar de las nóminas de los que tenemos que ir a trabajar. #NoVoyAP68agar

Porque la N-232 es una de las carreteras más peligrosas del Estado, una de las que más puntos negros tiene. #NoVoyAP68agar

Porque estoy harto de tener que “jugármela” con camiones, tráilers, y a partir de ahora, con más camiones y más tráilers. #NoVoyAP68agar

Porque no puedo soportar tener que ir por una carretera donde casi el 40% de lo que transita son vehículos pesados. #NoVoyAP68agar

Porque estoy harto de ver como muchos riojanos y no riojanos se dejan la vida en una carretera, habiendo a escasos metros una vía más segura. #NoVoyAP68agar

Porque en seguridad y salud de los ciudadanos no se puede recortar. #NoVoyAP68agar

Porque no me apetece que por esa autopista solo circulen a partir de ahora sus coches oficiales. #NoVoyAP68agar

Porque es verdaderamente doloroso que tengas que ir al entierro y funeral de gente que se ha dejado la vida en una carretera cuando hay una vía más segura justo al lado. #NoVoyAP68agar

Porque yo no quiero ir a más funerales y entierros. #NoVoyAP68agar

Y TU: ¿Vas a seguir pagando? YO: #NoVoyAP68agar

Sergio Mesal

martes, 2 de octubre de 2012

LAS PRIMERAS "RIOJADAS"


Finalmente, entre 1978 y 1981, se fue consolidando el tercer símbolo del autonomismo riojano: el "Día de la Rioja". Antes de que nuestra tierra alcanzara la Autonomía uniprovincial en el verano de 1982 se celebraron cuatro "Días de La Rioja": en 1978 en Nájera, en 1979 en Haro, en 1980 en Calahorra y en 1981 en Logroño. Cada uno de ellos estuvo marcado por rasgos muy diferentes.

En pleno verano de 1978 se pudo observar distintos "organismos" ocupados de canalizar la Autonomía de La Rioja. Por un lado está la "Mesa de fuerzas políticas de La Rioja" integrada en exclusiva por partidos de izquierdas (PSOE, ORT, PCE, MC, PTE, Izquierda Democrática y P. Carlista), aunque el soporte de información y dinamicidad de la misma esté en el PSOE; por otro continúa, con escasa actividad y frecuentes enfrentamientos internos, "La Asamblea de Parlamentarios"; en agosto nace "La Coordinadora pro-autonomía de La Rioja" con una intención muy definida: iniciar una campaña de recogida de firmas para solicitar la Autonomía y preparar la celebración de un "Dïa de La Rioja". Y por si fuera poco, A.P. proponía a principios de agosto la creación de un órgano llamado "Convergencia Política Riojana", con la finalidad de auxiliar a la Asamblea de parlamentarios en las gestiones preautonómicas previas a la entrada en vigor de la Constitución.

Todos estos organismos trabajaban por separado, pero eran auténticos vasos comunicantes que compartían ideas, personas y hasta financiación, aunque en cada momento se guiaran por distintas estrategias. La verdad es, sin embargo, que entre todos convirtieron al estío de 1978 en una estación cargada de profundo fervor autonómico. Tanto fue así que, en dos meses escasos, se llegaron a recoger entre treinta y cinco y cuarenta mil firmas de riojanos en solicitud de su Autonomía. Esto supuso, evidentemente, fricciones mutuas que aportaron distingos entre los organismos, pero también tomas de decisiones mínimas conjuntas que sirvieron para "concienciar" al pueblo y "presionar" al Ministro para las Regiones.

Así las cosas, a mediados de agosto, en un ambiente de exaltación de riojanidad por parte de los ciudadanos y en un "toma y daca" con el Ministro Clavero después de distintas reuniones con él sobre la posibilidad de llegar a la autonomía riojana, los Partidos Políticos de nuestra provincia tuvieron que definir sus posiciones en una reunión de la Asamblea de Parlamentarios. La U.C.D. se alineó con las tesis subsidiarias propuestas por Clavero; A.P. se mantuvo en la propuesta defendida en su fórmula de "Convergencia"; Palomo se apoyó en las ideas de la Mesa de Fuerzas políticas; y el P.S.O.E. exigió posponer la cuestión hasta que se realizaran las Elecciones Municipales.

Todos coincidieron, sin embargo, en media docena de mínimos:
1) La Rioja es una región con identidad propia;
2) La Asamblea de Parlamentarios representa al órgano autonómico que se constituya;
3) Los parlamentarios deben reglamentar el funcionamiento interno de dicho órgano;
4) El órgano debe ser la máxima representación riojana, debe tener capacidad para realizar estudios y medios económicos para funcionar;
5) debe denominarse "CONSEJO GENERAL DE LA RIOJA"; y
6) el órgano debe constar de un Pleno y una Comisión Permanente.

En septiembre se había alcanzado, con mayor éxito de lo previsto, uno de los objetivos propuestos: la concienciación del pueblo. Quedaba claro que éste quería la autonomía. Pero sobre el segundo seguían las dificultades. No había manera de convencer a Clavero, al Gobierno. Y para complicar aún más el asunto, en la primera semana de septiembre saltaba el rumor de que Clavero y la U.C.D. querían integrar a nuestra provincia en Castilla.

El revuelo fue descomunal. Muy pronto se dieron las respuestas. La UCD riojana desmiente "con enfado" el rumor. La "Mesa de fuerzas políticas" se reúne el día 6 para que el Diputado del PSOE informara de lo que pasaba. Cosculluela explicó que Clavero no admitió la posición de la Asamblea de Parlamentarios Riojanos de que una vez elegida la nueva Diputación Provincial ésta consultara a los Ayuntamientos sobre si querían la Autonomía. Después de esto nació la campaña de firmas, capitalizada por A.P. que exigía la autonomía "ya", y la U.C.D. riojana, ante el temor de pérdida de votos, se "manifiesta abiertamente sobre la autonomía", pero únicamente "para la galería", pues conoce que el gobierno se opone a ella. Lo más positivo de la reunión fue que se concretaron aspectos para la celebración de "El Día de La Rioja". Y finalmente, el día 8, A.P. y PSOE piden una reunión de la Asamblea de Parlamentarios para aclarar el rumor y la posición de la UCD.

El día 21 del mismo mes la disputa se entabla entre la Comisión Ejecutiva del PSOE y el diario "Nueva Rioja". Este periódico publica un Editorial en el que ataca duramente los posicionamientos del socialismo sobre la autonomía y el órgano máximo de la Federación le responde con la misma moneda. Les dice que ese periódico ha publicado sobre la Autonomía muchos "chascarrillos" pero ningún estudio; que la autonomía debe ser aprobada por las Cortes Generales; que sólo la Diputación o dos tercios de los Ayuntamientos pueden tomar la decisión; que el socialismo no ha cambiado de opinión; y que son los votos del 15 de junio, "el voto es una ley de democracia", los que nos dan la fuerza para opinar, mientras que "hay quien sin un voto pontifica".

La "Coordinadora por la autonomía de La Rioja", en una reunión celebrada a principios de septiembre de 1978, decidió organizar y celebrar el primer "Día de la Rioja" en Nájera el día 8 de octubre. En la misma reunión acordó también que podían adherirse a él todos los partidos y organizaciones que lo desearan. El "Día" fue enfocado en un doble sentido: una mañana política con discursos, manifiestos y entrega de los pliegos de firmas recogidas durante el verano; y una tarde festiva. A Nájera acudieron los cargos políticos, incluidos todos los parlamentarios electos en junio de 1977, y numeroso público, pero el ambiente (texto de una pancarta: "Parlamentarios oportunistas, vais a las Cortes de turistas") y los organizadores (Manifiesto en el que se les ataca) terminaron enfrentados con los parlamentarios, retirándose de los actos seis de estos últimos, entre los que estaba el Diputado del PSOE Javier Sáenz Cosculluela.

"A pesar de todo, La Rioja vibró"; tal como titulaba Nueva Rioja su crónica sobre el "Día", pero las estrategías sobre la autonomía y sus símbolos ya no volvieron a ser iguales. Después de Nájera o del primer ´"Día de La Rioja" los partidos se desligaron de Coordinadoras y organizaciones, que según los representantes electos, "no representan a nadie".
Los enfrentamientos de Nájera fueron una sabia experiencia para la organización del segundo "Día de La Rioja" celebrado el día 7 de octubre de 1979 en Haro. En esta ocasión la Diputación Provincial democrática se encargó de la planificación del "Día", delegando en una mini-comisión formada por el Presidente de la Diputación, tres Diputados Provinciales de cada uno de los partidos con representación en el ente y un representante de cada uno de los partidos políticos, incluidos los minoritarios , asesorada por técnicos para las cuestiones festivas. Se acordó que los actos políticos se celebraran por la mañana en la Plaza de la Paz de Haro, hablando el Alcalde de la ciudad en forma de saludo, el Presidente de la Diputación para leer el Manifiesto conjunto de las fuerzas políticas, y dos parlamentarios electos, uno de la UCD y otro del PSOE.


La celebración fue todo un éxito. Sin demasiadas estridencias, y con un espíritu unitario sólido, el grito unánime de los cinco mil asistentes al acto político y de los seis mil integrantes de la manifestación posterior, fue "Autonomía para La Rioja". Lo proclamaron todos los oradores, las parcantas, los slogans, los carteles, las pegatinas... Como diría la prensa regional que se ocupó del "Día", se palpaba que "la autonomía de La Rioja ha pasado ya del mundo de los sueños al mundo de la realidad". 

En el acto político de la mañana el Diputado del PSOE Sr. Cosculluela insistió en las conocidas tesis autonomistas del socialismo riojano en estas fechas. La necesidad de un proceso autonómico unitario de todas las fuerzas políticas y organizaciones riojanas sin protagonismos personales ni partidistas; la finalidad democrática de la misma para que sirva de acercamiento del poder al pueblo; y la participación del mismo a través de todos los Ayuntamientos de la provincia, que expresarán, en acuerdos de sus Plenos, la postura sobre la autonomía de la provincia. Y concluyó: "en la España de las autonomías habrá una Rioja autonómica".

Más deslucida resultó la celebración del tercer "Día de La Rioja" en octubre de 1980 en Calahorra. No se observó la explosión autonomista comprobada en las celebraciones de los dos "Días" anteriores. El mal tiempo, "con temperatura invernal y constantes aguaceros", ayudó a ello, pero la causa principal estuvo en el desánimo y desencanto que muchos riojanos reflejaban en estas fechas en cuanto a las cuestiones políticas. Pese a todo, los calagurritanos recibieron al millar de riojanos que lograron reunir los cuatro partidos mayoritarios y el Partido Carlista, que fueron los convocantes, y los extraparlamentarios de izquerdas, MCR y PTR principalmente, que también asistieron. 

En los discursos protocolarios de los convocantes hablaron el Alcalde de la ciudad, el Presidente de la Diputación, Ibarra, que leyó el Manifiesto unitario de estas fuerzas, los carlistas, AP, UCD y PSOE por medio de Javier Sáenz Cosculluela. Este, después de recordar que La Rioja había recuperado su auténtico nombre, se refirió a los criterios que sostenían los socialistas en el proceso autonómico. En primer lugar manifestó que estaban en Calahorra "para decir públicamente, ante todos los españoles, que queremos la autonomía, un Estatuto de Autonomía", y en segundo lugar, insistió en que la vía elegida, la del 143, reflejaba la voluntad mayoritaria expresada ya por los representantes del pueblo riojano en sus Plenos municipales, y que por ello exigían que entrara en vigor cuanto antes un Estatuto de Autonomía de La Rioja "igual a los de los demás pueblos que han accedido ya a la autonomía".



La celebración del cuarto "Día de La Rioja" el 4 de octubre de 1981 aún fue peor. La desmovilización fue propiciada fundamentalmente por las derechas, tanto desde las sedes de sus partidos, como desde las instituciones en las que participaban. Pero no sólo por ellas. También influyeron asociaciones, como "Amigos de La Rioja", que pidiendo apoliticismo en una cuestión plenamente política como la autonómica, encubrieron sus contradicciones culpando de inhibiciones a entidades también plenamente políticas. Y también influyeron, y de gran manera, las redacciones de los periódicos que se afanaron en minusvalorar los actos organizados por las izquierdas.

En el fondo estaban las discrepancias entre las fuerzas políticas mayoritarias de la provincia, que si hasta ahora habían mantenido sobre dicha fecha un matizado espíritu unitario, tras la lamentable experiencia del año anterior, hicieron, que cuando tocaba organizar el "Día" a la capital de la provincia, no llegasen a ningún acuerdo.




La situación sobre la celebración del "Día de la Rioja" de 1981 era así en septiembre. Los partidos mayoritarios de las derechas habían decido "pasar" del "Día". La UCD, porque esperaba celebrarlo en la fecha de la firma del Estatuto de Autonomía, y AP, porque consideraba que era necesario cambiar los planteamientos, ya que hasta ahora el "Día" había servido para que "unos cuantos incontrolados" se dedicaran "al insulto y al griterío constante". Los partidos de la izquierda habían constituido el 5 de septiembre una "Comisión pro IV Día de La Rioja" bajo la consideración de que no estaban dispuestos a que la derecha "les robase el "Día". Pero no fue demasiado efectiva. En consecuencia, la izquierda socialista decidió a mediados de septiembre celebrar el "IV Día" en Logroño, y sóla, sino no se unían otros grupos políticos, sindicales, autonomistas y culturales. 

Por otro lado la izquierda extraparlamentaria, unida ahora en la Coordinadora de la Izquierda Riojana, preparó la celebración por su cuenta, sobre un programa de actos distribuidos por todas las cabeceras de comarcas, aunque dando un mayor relieve al acto político, la manifestación y el festival festivo a celebrar en capital.
Los titulares del diario La Rioja, en la página 8, del día 6 de octubre de 1981, sobre la celebración del IV "Día de La Rioja" eran los siguientes: "El "Día de La Rioja", celebrado casi en familia, en dos convocatorias". "El Presidente del Parlamento Foral prometió que "Navarra será amiga y compañera inseparable de la autonomía de La Rioja"; y en la mitad de la página un segundo título: "Unas 300 personas en el acto de la Coordinadora de Izquierdas". No se dieron primeras páginas, ni varias, ni ladillos subrayados, ni editoriales emocionados,... como en años anteriores. Sólo una página: la octava.


BIBLIOGRAFÍA: www.bermememar.com

viernes, 21 de septiembre de 2012

UN SIGLO DEL BETI JAI - LOGROÑO







Agustín Cadalso

Logroño. Día de San Mateo de hace 100 años. Se inauguraba un nuevo frontón en la ciudad. Ajeno a las inclemencias del tiempo por estar cubierto. Cancha de 54 metros, 10,5 de ancha y 74 metros de fondo, gradas con palcos y techumbre de cristal. Los materiales para la construcción eran locales, no así el capital, que era navarro. De ahí su nombre, que evocaba al que hoy en día sigue en pie en la calle Marqués de Fiscal de Madrid del año 1894. El Beta Jai de Logroño, obra del arquitecto Agustín Cadalso, se instaló en terrenos de Pedro Iñiguez y echó a andar en las fiestas siendo su construcción meteórica. Junto al Instituto y entre las calles Duquesa de la Victoria y Avenida de las Adoratrices, cerca del convento.

Fachada del frontón
Primer partido
Hace un siglo Logroño tenía pocas cosas más allá de esa barrera de lo que es hoy el Sagasta. La plaza de toros, que estuvo ubicada en la confluencia que hoy marcan el cruce de Duquesa de la Victoria y Avenida de Colón y que se incendió un año más tarde dando lugar a la de la Manzanera. Se instalaron tres farolas en la calle para dar sensación de cobertura a una zona en expansión.

Aquél día de otoño se inauguraba a las diez de la mañana el recinto con un concierto a cargo del Regimiento de Bailén y media hora más tarde con un partido de remonte a cargo de Tacolo y Artamendi contra Ucín menor y Errezábal que ganaron los primeros por 50-41 y otro de mano a cargo del Chiquito de Azcoitia y el riojano Bojas frente a Fernández mayor y Baltasar ganado por el murillejo y su compañero por 20-13. Llenazo con 500 personas, hablaban en la época que pasaron por taquilla a 0,75 céntimos (de peseta) por una localidad en la galería, 1,5 en la primera fila alta y a 2 pesetas el palco.

Interior del Frontón
La sociedad del Beti Jai, compuesta por Isidro Íñiguez Carreras (presidente), Herreros de Tejada, Murillo y Mardura (intendente) llegó a Logroño con la intención de quedarse y explotar el recinto no sólo con la práctica del noble y viril sport vasco hasta entonces instalado en la Calle del Norte en el Frontón Logroñés, que era el espacio 'natural' para la pelota en la capital riojana. Conciertos, celebraciones, circo, lucha libre y espectáculos sin fin se instalaron en este nuevo ágora deportiva que se abría a la ciudad y que había costado 300.000 pesetas (1.800 euros de hoy). Mientras la pelota a mano parecía estar instalada junto a las murallas de El Revellín, el Beti Jai se centró en la explotación del remonte, una especialidad que permitía ofrecer partidos a diario y extender la apuesta como fórmula para amortizar la inversión.

Remontistas
No tardó la sociedad propietaria en instalar calefacción y cine. Seis películas se pasaron en 1913 como estreno. El Beti convivía con las programaciones que se ofrecían en San Sebastián (Jai Alai) y Pamplona (Euskal Jai), el Vitoriano y el Moderno de Madrid, entre otros. Los remontistas iban y venían para dar oxígeno a las programaciones con gente nueva y atraer al público. Entre la nómina de remontistas, escasa población riojana, a excepción de los hermanos Lechuga y Román Munilla. De 1912 a 1916 se abusó de partidos hasta el punto de dejar sin sentido las programaciones. A eso se le añade los primeros partidos de raquetistas femeninas procedentes de Madrid en 1918. El Beti Jai entró en una fase oscura agravada por las difíciles condiciones de vida. Europa se tambaleaba con la Primera Guerra Mundial y la gripe hacía estragos entre la población.
En 1920 el empresario riojano Hipólito Bergasa se hacía con la propiedad del frontón. También se le daba un giro a al Frontón Logroñés, que se adecentó y cubrió para dar mayor confort a los aficionados. En la década de los 20 el Beti Jai ni se usa, al menos como espacio para el deporte. Salón de baile, cine y taller mecánico son las actividades centrales. Logroño devoraba el cine con deleite y la pelota (a mano) la capitalizaba el Frontón Logroñés. Eran años en los que la ciudad devoraba las crónicas de los valientes héroes de la aviación española, entre los que se encontraban Eduardo González Gallarza y Niceto Rubio. El primero materializó con éxito el vuelo Madrid-Manila, y el segundo, como miembro de la escuadrilla Atlántida que llegó a las colonias africanas cabotando el continente negro antes de que el cartero Lindberg cruzara el Atlántico en solitario convirtiéndose en el gran pionero.

Reinauguración del Beti Jai
A partir de 1927 el Beti Jai reabre sus puertas para el deporte de la pelota, ya que también quiere parte del pastel de la calle del Norte, desde donde contraatacan con la instalación de un cinematógrafo. Eran buenos tiempos para los pelotaris. No daban abasto. Si no era en uno, era en otro frontón donde jugaban y pasaron a estar bien pagados porque los empresarios querían mantener plantillas fijas para mantener programaciones fijas.

En 1928 se hacen reformas en el Beti Jai. El espacio para el baile había recortado el área de la cancha y donde Mondragonés, en un partido, llegó a poner ¡58 rebotes! Con las mejoras el periódico vasco 'Excelsior' ensalzó las virtudes del frontón y gracias a su empuje lo reinstaló en el circuito más importante del desarrollo de la actividad pelotazale. Viguera, Alcanadre, los hermanos Gato Rojo, Higinio, Monís, Bojas II y el gran Corono capitalizaban el interés de los aficionados riojanos. Pero Bergasa se cansó de llevar todo el peso del Beti Jai y cedió en arrendamiento el frontón.

Desde 1930 fueron innumerables los empresarios que quisieron hacerse cargo del recinto. El primero de ellos fue Ricardo Urbina, pero chocó pronto con la realidad. La competencia fuera de Logroño era feroz y los pelotaris punteros lograban mejores beneficios fuera de Logroño. Quizá Bergasa fue el primero en atisbar el problema y que Logroño carecía de grandes figuras. Así, las programaciones con la gente importante se centraban en las fiestas, aunque la agitación social en España era notable y empezó un tiempo de zozobra con los movimientos sindicales y la llegada de un espacio político renovador como la República. Costó rehacer la normalidad, pero llegó, a pesar de los incidentes de Arnedo del 32, pero como el resto de Europa estaba peor, España vivió un renacer que permitía hablar de grandes obras, como por ejemplo la del túnel de Piqueras y otra aún más osada, como la de enlazar España y África a través del Estrecho, un gran proyecto del que volvía a hablarse con fuerza desde que 1917 se presentara.

Logroño exhibía modernidad con la instalación de la primera emisora EAJ18 y había tiempo para que se organizaran concursos de belleza en el Beti Jai que arrojaban como ganadora a Matilde Benés como primera miss Rioja. Mientras, la gestión deportiva del frontón pasó de Urbina a Ábalos y de éste a Marcial Chaboy, un arriesgado empresario que se hizo cargo del frontón hasta que llegó la Guerra Civil. El frontón cedió su espacio para la instalación de una cárcel provisional. Malos tiempos de nuevo. La pelota dejó de repiquetear en las paredes del Beti Jai, pero pronto el nuevo régimen entendió que había que revitalizar con entretenimiento a la población y la pelota era el mejor argumento para ello.
Raquetistas

En 1941 se empezaron a montar los primeros campeonatos territoriales de pelota. A falta de estrellas la actividad empezó a concentrarse en el campo amateur. Ruperto, Valverde, San Miguel y Cantarín, entre otros, afloraron como nuevas figuras locales y sobre ellos recae el peso de guarecer en sus manos el lento renacer de este deporte aunque la llegada de las grandes figuras norteñas fuera una quimera. Fue a partir del año 1942, con Izaguirre como director del Beti Jai, a expensas de un nuevo grupo empresarial dirigido por el señor Cuscó, cuando se dio con la fórmula mágica para llenar nuevamente el frontón. Las raquetistas.

Las mujeres raquetistas fueron algo más que una anécdota en la andadura de este frontón. Desde 1942 a 1945 se ofrecieron casi 6.000 partidos de mujeres-pelotari.
María del Pilar Gutierrez

 Entre ellas destacó la figura de la riojana Pilarín, notable jugadora que logró apañar los ingresos propios y familiares de unas mujeres que, detrás del glamour del frontón, vivieron situaciones dramáticas en la postguerra. Tal fue el empuje y la atracción que ejerció entre el público riojano la presencia de las señoritas, que el Beti Jai concentró todas sus energías en desarrollar esta faceta de la pelota. Pero esta voracidad por ver a las chicas en acción no eran sino una válvula de escape y el reflejo de la sensación de ahogo de una sociedad que se permitía editoriales del estilo: «El beso en el cine es atentatorio a la moral pública y a la espiritualidad pulcramente española».

Los manistas se enfadaron por su pérdida de presencia y muchos tuvieron que hacer las maletas. La mano se centró en los pueblos riojanos y Haro, con su flamante Carrasco, recuperó el brillo de las programaciones sin permitir que la afición decayera. Se unió con energía el frontón Jardín de Santo Domingo a la actividad de mano, mientras se iba gestando el desarrollo de la pelota moderna. La incipiente Federación Riojana de Pelota, dirigida por Javier Adarraga, promovía matinales en el Beti Jai con el fin de dar cabida a miles de partidos de aficionados y el público concentraba sus energías entre Territoriales, Interterritoriales y torneos del Frente de Juventudes para saciar el hambre de pelota. 




Fue en 1947 cuando La Rioja encontró en Barberito la figura que llevaba décadas buscando. El astro de Baños catapultó las pasiones por la mano y dio un nuevo giro a las tendencias. Como en el caso del remonte, las raquetistas pasaron al olvido. La fórmula volvió a agotarse.

Abel San Martín - Barberito
Fue en medio de la II Guerra Mundial, cuando aquí se formó una buena con Abel San Martín. Entre él y el caracolero Titín llevaron a La Rioja a lo más alto del campo aficionados. Hubo intentos previos con otros jugadores, pero nunca se terminó de redondear la faena. José María Escolar y Manuel Royo tomaron el relevo del frontón tras Izaguirre y es a partir de este momento cuando las carteleras empiezan a notar variedad y rotación antes de dar paso al señor Ibernia, empresario del Carrasco, cuya capacidad de maniobra se estrelló con la realidad.
Titín I

En 1948 tomó las riendas del frontón Efisio Alti, que había dirigido Empresas Unidas. Hijo del jarrero Juan Alti y padre de Juan Carlos Alti, trató de darle un nuevo empuje al Beti Jai. La pelota vivía el ocaso de Atano III y se dejaba deslumbrar por Miguel Gallastegui como principal adalid de la pelota.

Y llegó el ocaso del frontón. Barberito alcanzaba su techo como pelotari en 1953, gracias a su título manomanista, y Logroño y su afición llenaban el frontón a cada paso de Abel. La vida del Beti Jai empezaba a dar síntomas de agotamiento. Las dificultades para competir con otros frontones y la mala experiencia empresarial por salvaguardar el bello recinto logroñés hizo que el Beti Jai cayera en el olvido por simple abandono. Aquel escenario de otros tiempos, que colocó a Logroño en la modernidad, ya no interesaba. El Diana prolongó la vida de un edificio que echó el cierre definitivo para la pelota en 1956. La actividad quedó desnuda, sin un recinto donde refugiarse. Sin una instalación óptima, la pelota cayó en un pozo y muchos pelotaris tuvieron que encontrar refugio en otras comunidades. El Carrasco intentó mantener la línea continua de la pelota después de muchos años convertido en cine, pero también tenía las horas contadas el recinto jarrero.
Moisés

La imposibilidad de competir de tú a tú con otros pelotaris nos alejó de las citas nacionales y representó un retroceso de crédito; pero entonces llegó otro impulsor, Moisés Moreno del Val, que como las semillas en un desierto, que con las primeras gotas de agua afloran, volvía a ponernos en el mapa. El frontón La Cadena de Arnedo fue un recurso para la mala época hasta que se construyó el Adarraga en 1964, un frontón que ya batido el récord de 44 años de vida que dejó atrás el Beti Jai. Larga vida.



 

TEXTO ÍNTEGRO: Miguel M. Nafarrate www.larioja.com
FOTOGRAFÍAS Y AMPLIACIÓN: Paco Bermejo www.bermemar.com

sábado, 11 de agosto de 2012

LA SARGENTADA DE SANTO DOMINGO DE LA CALZADA 1883.


Uno de los episodios de la historia riojana aconteció en la noche del 8 de agosto de 1883 bajo el reinado de Alfonso XII y presidiendo el Consejo de Ministros el riojano Práxedes Mateo Sagasta. El Regimiento de Lanceros de Numancia, número 11 del Arma de Caballería, con varias de sus unidades acantonadas en Santo Domingo de la Calzada (La Rioja), toma parte en la sublevación militar de tendencias republicanas radicales, promovida por la Asociación Republicana Militar (ARM) que dirigía Manuel Ruiz Zorrilla, pronunciamiento que también secundan otras unidades militares en Badajoz y en la Seo de Urgel (Cataluña). La sublevación fracasa y es en Santo Domingo de la Calzada en la única de las tres ciudade en las que termina trágicamente.

El teniente Juan José Cebrián Piqueras, que se presenta para dirigir al Numancia, muere en la acción y, tras Consejo de Guerra sumarísimo, son fusilados cuatro de los sargentos de la guarnición.

Uno de los republicanos zorrillistas, pieza fundamental en el levantamiento del Regimiento Numancia, fue Juan Manuel Zapatero Castillo. Había nacido en Cervera de Río Alhama el 21 de octubre de 1849. Estudió Comercio y con catorce años ya organizará un plan contra la monarquía. En el Sexenio Democrático formará parte del Comité Republicano de su localidad. En 1870 participó en la Guerra franco-prusiana formando parte de la Legión Garibaldina. El 27 de noviembre de 1872, con 400 hombres armados, proclamará la República en su localidad de nacimiento, siendo procesado por ello. En la Primera República fue jefe de los republicanos riojanos. Se pasó al zorrillismo y participó en Barcelona en la preparación de la sublevación. Tras ésta, sería condenado a cadena perpetua, por lo que se exilió en Francia. Volvió a España para continuar su militancia republicana y revolucionaria. Murió el 27 de marzo de 1925 en su localidad de nacimiento.

Tras la autorización de Zaragoza el teniente Cebrián, oficial del Regimiento de Reserva de Caballería nº 24 de Logroño, salía en dirección a Santo Domingo de la Calzada el día 7 de agosto a las dos de la tarde. Su intención era liderar el levantamiento del Regimiento de Caballería de Numancia de Santo Domingo de la Calzada que conocía por haber pertenecido a él. Llegó a las nueve de la noche. Zapatero se dirigía también a la misma ciudad pero vía Haro.

Siguiendo con la crónica del hijo de Zapatero, Cebrián se reunió hasta dos veces con los oficiales, lo que confirma la participación activa de éstos. Los sargentos, que se encontraban en el cuartel, fueron también informados de los planes. La orden de Cebrián era que debían esperar hasta que se levantase Logroño.

Sin embargo la impaciencia pudo con ellos y Cebrián y Zapatero acordaron iniciar el levantamiento en la madrugada del ya día 8. Mientras eso se producía Zapatero y Francisco de Paula Marín subirían a Ezcaray para acordar con el teniente coronel Llorens los detalles de su alzamiento. La primera orden era que debían esperar a la sublevación calceatense. Zapatero, antes de dirigirse a Ezcaray le diría a Cebrián: «Hay que volver a requerir a los demás oficiales con verdadero interés; más que por la ayuda material, por la moral; porque ellos en gran número, dan al soldado una mayor confianza». Nuevo ejemplo de la participación de aquellos.

Zapatero y Marín llegaron a las dos y media de la madrugada del ya día 8 a Ezcaray. Llorens no levantó el acuartelamiento en espera del correo de Santo Domingo, correo que nunca llegó. Según el hijo de Zapatero, Marín mandó a un emisario para que le informara de lo que había sucedido en Santo Domingo y le indicó que ya se había producido el levantamiento. Llorens tomaría entonces la decisión de dirigirse por una vereda a Torrecilla para unirse a Cebrián. Salieron haciendo ver que iban en persecución del Numancia pero en Santo Domingo de la Calzada fueron interceptados por las tropas de Haro. Zapatero y Marín, viendo el fracaso, huirían a Francia.


A las dos y media de la madrugada el teniente Juan José Cebrián Piqueras había levantado al Regimiento de Caballería de Numancia acantonado en el ex convento de San Francisco de la ciudad calceatense.

El maestro de trompetas, tres sargentos primeros y nueve sargentos segundos «sobornaron» a 224 hombres, entre cabos y soldados. Cebrián se había presentado en el acuartelamiento haciéndose pasar por coronel. No hubo resistencia, desconociendo los soldados el porqué y a dónde se dirigían.

El oficial al mando del regimiento era el coronel Ramón Rubalcaba Juárez de Negrón. Salió dos horas después en persecución del Numancia acompañado por otros hombres.
Por otra parte en Haro se movilizó el Regimiento Bailén. En Logroño lo hicieron los Regimientos Príncipe y Almansa, a las órdenes del Brigadier Martí y el Coronel Almansa, que en principio tenían que haber tomado parte de la sublevación. Finalmente y a última hora habían desistido.

El alcalde de la ciudad calceatense enviaba unas horas después al gobernador civil, que a su vez se lo hacía llegar al ministro de la Gobernación, un telegrama informando del levantamiento. Cebrián había salido en dirección a Torrecilla en Cameros, o sea hacia el este. La primera localidad que pisó fue Cirueña.

Tras una legua y media recorrida por los perseguidores, comenzaron a encontrarse elementos rezagados debido al intenso ritmo de la marcha. El Diario de las operaciones del Numancia, publicado por San Baldomero y Olmos, señala que, perdida la pista, volvieron a encontrarla gracias al sargento Agustín Bendito, siguiendo hacia Cordovín, Badarán, Baños de Río Tobía, Bobadilla y finalmente Pedroso.

Pedroso
La prensa informa de que a las ocho de la mañana había llegado a Pedroso el regimiento sublevado, y que habían parado para reponer herraduras a la caballería que venía descalza por el intenso ritmo. De ahí partirían para Torrecilla en Cameros por el Serradero. La crónica de Zapatero señala que «Al cruzar sin parar la calle estrecha y larga de Pedroso, los vecinos despertados a los gritos de ¡Viva la República! echaban a los soldados bacalao, pan, botellas de vino. Se sumaban a su modo al corazón». Ningún periódico habla de ello.

A una legua y media de Pedroso, en dirección a Torrecilla en Cameros, los perseguidores alcanzaron la retaguardia de los sublevados. Setenta soldados se unieron al grupo de O´Mulryan. Los sublevados lanzaron algunos disparos, no así los perseguidores, pero que no alcanzaron a nadie «seguramente también a que la tropa hacía fuego de una manera completamente forzada». O´Mulryan, viendo lo estrecho del paso hacia el Serradero, punto de fácil ataque, y lo agotados que se encontraban los caballos, decidió volver sobre Pedroso para herrar a los animales y darles pienso. Allí permanecieron unas tres horas. Desde allí enviaría Rubalcaba a un hombre para observar la situación de Torrecilla, el cual informó que las cuatro torres y la puerta de la localidad estaban tomadas.

Las crónicas periodísticas dicen que, apenas quince o veinte minutos después de la salida de Pedroso de los sublevados habían llegado a la localidad el coronel Rubalcaba y sus oficiales.
A Torrecilla llegaron los sublevados a las nueve de la mañana pero no encontraron a nadie. Cebrián tomó la decisión de esperar a los regimientos supuestamente levantados colocando vigilancia en las torres de la población.

Después de unas horas de espera, sobre las seis y media de la tarde, se acercaban ya a los perseguidores, a los que se habían sumado cerca de un centenar de rezagados. Ante esta nueva situación Cebrián tomó la decisión de proseguir su camino hacia Tarazona por tierras de Soria. Parece que finalmente le habían informado además de que el coronel Cortijo con el Regimiento de Lusitania y otro de infantería subían desde Logroño en su busca. Zapatero habla de que hubo un amago de abandono por parte de Cebrián, pero que finalmente decidió proseguir.

El Diario del regimiento indica que a las seis y media de la tarde llegaban finalmente los perseguidores a Torrecilla, y que apercibidos los sublevados, salieron precipitadamente camino de Soria unos sesenta hombres «entregándose otros tantos a la fuerza leal».

Junta de los Ríos - Villoslada de Cameros
Pasada la localidad de Villanueva de Cameros y en dirección a Villoslada, en el lugar conocido como «Junta de los Ríos», uno de los soldados que aún continuaba con Cebrián, Pedro Ramírez Lázaro, «El Pinche», natural de Albelda de Iregua, quizás ya desanimado, disparará su carabina por la espalda contra Cebrián matándole. Eran las nueve de la noche. Rubalcaba le entregó 25 pesetas ese mismo día y el general Genaro Quesada, jefe del Ejército del Norte, le daría posteriormente 1.000 más. El rey le concederá además una pensión vitalicia. Tiempo después moriría de tres puñaladas tabernarias.

El resto de soldados apresó a los cuatro sargentos. El Correo informaba de que la muerte se produjo sobre las diez de la noche. Tadeo Salvador, gobernador civil, en su comunicado oficial señalaba que serían las nueve de la noche.

En Villanueva de Cameros sería enterrado Cebrián, siendo retenidos en una habitación del mesón los sargentos Gómez, Cano, Guerrero y Alonso. En el registro civil de dicha localidad se conserva su acta de defunción, y en el libro de difuntos de la parroquia se informa de su entierro en el cementerio local. A las ocho de la mañana del día siguiente volvían hacia Santo Domingo de la Calzada. El día 12 a las 7 de la mañana se celebraba en Santo Domingo de la Calzada un juicio sumario verbal. Fueron condenados a muerte cuatro de los sargentos sublevados, los que se mantuvieron hasta el final con Cebrián.

En la actualidad y desde el año 2006, dos calceatenses, Enrique Ibáñez y Juan José Díez, simpatizantes de la causa republicana y aficionados al senderismo, llevan a cabo una marcha conmemorativa de dicho acontecimiento a la cual se ha ido sumando muchas personas a lo largo de estos años. La ruta parte de Santo Domingo de la Calzada y pasa por Cirueña, Canillas de Riotuerto, Cordovín, Badarán, Baños de Río Tobía, Bobadilla, Pedroso hasta llegar a  Torrecilla en Cameros donde tiene lugar un recibimiento de los caminantes y una comida popular.

Sobre este acontecimiento también se han escrito diversos libros, uno de ellos “La sublevación de Santo Domingo de la Calzada de 1883” por Francisco Javier Díez Morrás del cual he extraído gran parte de este artículo y que narra con mayor profundidad lo acontecido en torno a este suceso. La Revista Piedra del Rayo también le ha dedicado artículos.

Javier Martínez Foncea



Texto Integro: La Sublevación Republicana de Santo Domingo de la Clazada 1883. Francisco Díez Morrás. Instituto de Estudios Riojanos. 


BIBLIOGRAFÍA:

Apuntes sobre la Sargentada. Agustín García Metola. 


La Sargentada. La Barranca.


Los ecos de la Sargentada. El Correo.


La Sargentada 2012. Periódico La Rioja.  


Revista Piedra del Rayo.


FOTOGRAFÍAS:

1 Portada del libro: La sublevación de Santo Domingo de la Calzada. 1833

2 Pedroso. Carlos Sieiro del Nido. Panoramio.

3 Junta de los Ríos. Villoslada de Cameros. José Ramón Francia Silva. Panoramio.



lunes, 30 de julio de 2012

CHIRIJOTAS DEL EBRO


Todavía no salgo de mi asombro con la noticia que hace varias semanas pude ver y seguir en distintos medios de comunicación y redes sociales. No es que hubiese sido una ríada, pero la noticia de mezclar Rioja, Navarra y Aragón dejó un buen reguero de comentarios y opiniones y porque no decir, carcajadas, en toda la zona Ebro y la que no es Ebro, como si en los Carnavales de Cádiz estuviésemos.

No se que se les puede pasar a algunos dirigentes y no dirigentes políticos (por suerte) por la cabeza, para cuestionar a estas alturas el estado autonómico tan firme y consolidado como el que tenemos ahora. Es normal que bajo la situación económica en la que nos encontramos, la psicosis cunda y nos cuestionemos todo el sistema político y administrativo del que formamos parte, pero de lo que no tenemos duda y en especial los riojanos, es que la autonomía para la Rioja significó, significa y significará todo un logro que nos hizo avanzar en riqueza y prosperidad para nuestra tierra.

Soy partidario aún así, de la exigencia de más competencias para nuestra tierra, de abrirnos por completo a un estado federal equilibrado y solidario, pero comprendo que es un debate ahora mismo embarazoso, pues vemos como autonomías en la actualidad quieren llevar a este país a la ruina, y no son las que muchos nos pensamos. Con sus cifras de endeudamiento astronómicas, más bien son Valencia y Madrid entre otras, las que verdaderamente quieren romper España con sus derroches, ahí, es donde verdaderamente está uno de los lastres de la coyuntura económica, otros mientras tanto, siguen haciendo cortina de humo a costa de los separatismos e independentismos, para así acabar con todo, en este caso las autonomías, y volver a tiempos pasados, de los cuales seguro que algunos dirán que se vivía mejor.

Precisamente de vivir mejor, es de lo que trata la cuestión, ¿Qué sería de la Rioja si no fuéramos autonomía? ¿Viviríamos mejor que la media como presumen algunos? ¿O simplemente viviríamos como una provincia más como Soria o Teruel? Servidor y muchos probablemente ya me conocen, soy bastante crítico con decisiones que toman nuestros gobernantes riojanos, considero que en la Rioja no se vive mal, pero creo que se podría vivir mejor, pero de lo que no me cabe duda es que ahora mismo no viviríamos la mitad del modo en cómo estamos ahora, si fuéramos una simple provincia de Castilla, del País Vasco, de la Ebro Región que se fascinan algunos, o de donde nos quieran encasillar porque lo veo imposible. Me gusta Navarra, y me encanta Aragón, pero como dice el dicho “cada uno en su casa y dios en la de todos”.

La autonomía riojana costó gran esfuerzo y sudor a los riojanos de entonces, es piedra angular de nuestra existencia y base de nuestro futuro, como para que ahora algunos ¨iluminados¨ quieran acabar con ella. Por desgracia, estamos acostumbrados a que los políticos nos estafen con sus programas electorales y sus falsas ideas, “nos la meten doblada” que se suele decir, pero en este caso, por suerte que no error, hemos descubierto las intenciones ocultas de UPyD para con nuestra tierra, avisados estamos.


David Antón Elías 
Tribuna de opinión en La Rioja 30/07/2012

miércoles, 18 de julio de 2012

LA FILOXERA EN LA RIOJA

1 Imagen de la filoxera

La filoxera de la vid es el nombre común de la especie Viteus vitifoliae (= Phylloxera vastatrix, = Dactylosphaera vitifolii), insecto hemíptero homóptero de la familia Phylloxeridae.
Su origen se sitúa en Estados Unidos, donde se alimenta de las hojas y raíces de la vid americana. Los daños que produce dependen del tipo de vid, ya que no participa exclusivamente en su muerte, sino que suele venir acompañada de hongos y bacterias que necrosan y pudren las raíces.

El huevo pasa el invierno entre la corteza de la planta y eclosiona en marzo-abril, apareciendo una “larva fundadora”. Esta larva se dirige hacia las hojas y pica en su parte, formándose una agalla en su envés. Puede poner hasta 600 huevos, de los que salen pulgones “neogallícolas- gallícolas”. El 10% de los individuos que dan estos huevos se quedan formando agallas en las hojas y el 90% migran a las raíces (pulgones neogallícolas-radicícolas). Éstos últimos son menos fecundos que los gallícolas.


2 Evolución de la filoxera en España
El primer registro de filoxera en España se remonta a 1878, en Málaga. Este foco sorprende puesto que no responde a la expansión natural de la filoxera por Europa, como sería lo esperable entrando por Cataluña a partir de Francia, sino a un fenómeno de importación.

En Europa se produjo a la vez por varios puntos: Francia, Portugal, Alemania y Austria. Esto se debió a la importación desde el estado de Georgia (EE.UU.) de la variedad Isabela de vid americana, con el objetivo de combatir la plaga de oidium que estaban sufriendo en ese momento las vides europeas. Estas importaciones trajeron también la filoxera, que, ya en Europa, fue poco a poco eliminando a las vides europeas, no adaptadas a estos tipos de insectos. La filoxera llega a Europa en 1868, detectándose en tres focos: dos en Francia (Burdeos y Gard) y uno en Austria (Viena). A partir de aquí se fue extendiendo por el resto del continente.

En consecuencia, y en lo que al caso riojano se refiere, en la década de los setenta, se buscó organizar una resistencia férrea para paliar los efectos que ya se habían producido en otros países y en varias zonas vitícolas de España.
3 Difusión de la filoxera en España
Así en 1878 se formó la Comisión Provincial de defensa contra la Filoxera que pretendía la creación de un fondo económico para cuando llegara el momento de su invasión en La Rioja se pudiera hacerla frente con ciertas garantías. Las noticias de la expansión de la plaga por el territorio estatal se trataron en muchas sesiones de la Diputación. En la reunión del 4 de noviembre de 1881 se mencionó la alarmante situación padecida en los viñedos de los bajos pirineos de Francia, y se pidió la elección de "un medio práctico que la impidiera, así como la ampliación del vivero provincial".

En 1893, en plena crisis de comercialización, empezaron las Circulares de la Diputación para impedir la entrada de plantas y productos agrícolas que no reunieran las debidas condiciones, así como se dieron instrucciones para la rápida destrucción del viñedo con síntomas sospechosos.

Los problemas, sin embargo, aún no se vivían directamente en la Rioja. Las discusiones de los líderes políticos se centraban sobre la falsedad de los datos base para determinar las cantidades a repartir entre los distintos municipios en la "lucha contra la filoxera"; o sobre la no admisión por parte de algunos ayuntamientos de las cuotas designadas; o sobre la desidia de los pueblos al no enviar a la comisión los datos sobre el número de hectáreas de viñas que tenían plantadas.

4 Filaxera
Pero desde el año 1897 el cerco se estrechó alrededor de los viñedos riojanos. La enfermedad ya había atacado a los viñedos navarros. Y al año siguiente la Comisión Provincial de defensa contra la Filoxera dio intrucciones, en términos tajantes, para el reconocimiento que iba a realizarse por todos los pueblos de la la Rioja de acuerdo con el Servicio Agronómico Provincial. La controversia o morosidad a ellas serían multadas con cantidades de 20 a 300 pesetas. La "marcha aterradora" de la plaga dio motivo para una nueva Circular a comienzos del año 1899. Se prohibía la importación de todo género de sarmientos, cepas, pués, ... y cualquier otro residuo de la vid, así como de cualquier tipo de árboles y plantas.

Finalmente la lucha resultó infructuosa. En junio de 1899 se detectaron los primeros síntomas de la enfermedad en las cepas del municipio riojalteño de Sajazarra. En el verano de 1902 estaban infectadas todas las de la zona de La Rioja Alta y en 1904 las de las zonas restantes.



Aitor González Zurbano

BIBLIOGRAFÍA:

Viticultura Atlántica: http://blancolexitimo.wordpress.com/



La filoxera o el invasor que vino de América - Ignacio Pérez Moreno

FOTOS:

2 Entomología Aplicada
3 Viticultura Atlántica